Todo nace de una ilusión, todo sucede por una decisión, todo se precipita cuando se le aplica los dos últimos ingredientes, el toque final… Un puñado de actitud con una pizca de emoción, ¡genial combinación!
La vida está llena de cambios, ni mejores ni peores, simplemente cambios para poder realizarse como personas, avanzar o detenerse, tanto da, la cuestion es evolucionar para mejorar, poder ayudar, contribuir, respetar y amar, en fin ser coherente con lo que dicta tu corazón (con o sin razón).
Nuestro momento llegó, después de días sin descanso, de mucho luchar, escribir, diseñar, escuchar…
Estamos contentisim@s de sacar este proyecto adelante, forjado hasta el más mínimo detalle hasta quedar satisfech@s, colaborando con compañer@s, cuidando al máximo la procedencia y los manipulados de los materiales con los que trabajamos, desde el lugar de origen del algodón de nuestras prendas (100% orgánico) y cómo se recolecta hasta de donde sale el cartón de nuestro embalaje pasando por multitud de detalles: cintas, botones, estampados, etiquetas, tintes…
¡Intentamos con todas nuestras fuerzas dar lo mejor de nosotr@s y por ello contamos con la inestimable ayuda de la sonrisa, la alegría y la ilusión!
Mimamos a nuestros colaboradores de confección y procesado, magnífic@s profesionales y mejores personas, todos ellos situados prácticamente en una zona de amplia tradición textil, muy cerquita de nuestra sede a tocar de Barcelona, donde el sol y el mar baña el carácter de su gente, esa simpatía mediterránea que se aprecia en cualquier rincón, esa solidaridad y compromiso, esa inclusión y empatía, esa manera de hacer bonita nuestra ropa con un plus de sostenibilidad y calidad…
Nuestra marca está basada en las emociones.
No somos una marca cualquiera, somos una nueva manera de vestir el mundo, somos ¡¡¡OSOKOA!!!
Heartmade in BCN, Emotion brand!
En OSOKOA pensamos que las emociones mueven el mundo, son las que nos hacen pensar y decidir, y es por eso que hemos querido darle un hashtag de emoción y una explicación a cada prenda para expresar lo que hemos creado, decidido y sentido.
¿Y en quién si no confiarás para tomar las grandes decisiones? Siempre nos rodeamos de amigos, familiares, pareja… Pero sin duda seremos nosotros los que asumamos las victorias y derrotas de nuestra manera de hacer. Las victorias nos empujan en el camino y los fracasos nos enseñan que nunca es fácil caminar, pero siempre, siempre, confía en ti mismo!
Toda una declaración de intenciones, con la que se potencia el poder que tiene cada uno sobre sí mismo y escuchar su interior. Toda la fuerza nace del pensamiento que uno mismo es capaz de cualquier cosa…
¡Fuerte, valiente, decidid@! ¡Nadie puede dudar de que tú eres así, especial, diferente, únic@! ¡¡¡No dudes nunca de ti!!!
-¡No te atrevas a ser más de lo que sabes!
-¿A que no eres capaz de andar sola por el mundo?
-¡No puedes volar más allá de la realidad!
-¿A que no te levantas después de caer?
Dicen NO, NO y más NO…
¡¡¡Y yo digo NONINÁ!!!
¿Especial? ¿Qué es ser especial me pregunto?
¿Acaso no somos todos especiales? En lo distinto está la riqueza, en lo diverso reside el universo, en lo dispar se halla lo emocional… y no, no quiero ser normal, común, habitual, … Quiero ser un personaje diferente, vestir la capa en mi mente, un héroe sorprendente al que los míos vean valiente, cuya voz resuene potente. Quiero vivir en un lugar en libertad, donde no hagan falta vendas para cerrar los ojos e imaginar que uno es «normal».
Cocoloco es aquel que se siente vivo, de aquí y de allá, libre de mente e ideales, soñador, pallas@, a veces con corbata, otras con tacones, pensando siempre en avanzar y mejorar, levantándose antes de tropezar, ¡bañados en ideas de fuerza y libertad!
Cocoloco no es un sentimiento ni una situación, no es una destreza ni una emoción, Cocoloco es un estado permanente de ilusión, un estado necesario de evolución…
¿Eres tú un Cocoloco?
Nada importa más que no dejar que ninguna persona dicte a otra cómo tiene que actuar… Nacemos almas libres, para andar, correr o volar. La fuerza de este hastag surge de la necesidad que tenemos como seres humanos de no ser juzgados ni por nuestra manera de ser, ni por nuestra actitud. ¡Déjame ser yo!
No hace falta correr, el final no es el destino, es el camino el que nos lleva al fin… Decidir es lo que nos hace diferentes, decidir si avanzar, retroceder o girar, decidir a quién querer, si ir o volver, decidir cuánto tiempo estar… Decidir por qué vale la pena batallar, dar, recibir o regalar, decidir si saltar y la luna con la mano alcanzar… Decidir reír o llorar, decidir si cerrar los ojos mirar más allá y soñar…
Ropa mágica con la que la superheroína eres tú y, donde la simplicidad de una palabra alberga el sentir de la esencia de uno mismo…
¡¡¡Un mensaje corto, directo e impactante para decirle a los demás quién eres tú!!!
¿Por qué renunciar a algo que deseamos, solo porque nos critican quienes creen ser mejores?
¿Por qué dejar atrás nuestras metas, solo porque nos hacen sentir inferiores?
¿Por qué olvidar nuestros sueños aunque las alas nos quieran cortar?
¿Por qué renunciar a nuestra vida, para que otros se apoderen de ella y la quieran disfrutar?
¡¡¡Que nadie te robe nunca la ilusión, di no!!!
Sigue, no bajes los brazos. Si tropiezas vuelve a levantarte. Si lloras, que esas lágrimas no inunden tu corazón. Si te quedas a oscuras, que tu luz interior sea el faro que te ayude a salir…
Sigue, no pares de andar. Si los miedos te amarran a la tristeza, no dejes de navegar. Si sientes que no va bien, no desistas, ¡mañana mejorará!
Sigue, mantén la ilusión, ponle actitud y emoción, ¡no dejes de buscar lo que te pida tu corazón!
¡Sigue! no pares, ¡¡¡SIGUE!!!
Shhh…
Algo está cambiando…
Pequeñas piedras empiezan a mover montañas.
Diminutas gotas forman largos ríos.
Brotes nuevos hacen crecer bosques altos…
La tierra como nosotras está viviendo una metamorfosis. Donde antes había envidia ahora hay empatía, donde antes había tristeza ahora hay ilusión, donde antes había pesimismo ahora hay esperanza.
Shhh…
Escucha el ruido del cambio, olas que vienen y van, borrando a su paso un pasado desgastado de falsas creencias y esperanzas.
Instantes bonitos se tornan momentos eternos y acciones puntuales se vuelven costumbres geniales.
Levantemos almas y corazones, juntemos fuerzas y conciencias, trabajemos codo con codo, sin prejuicios, sin ira ni resentimiento, sin odio ni violencia, sin miedo ni soledad.
Llega una nueva manera de ver y cuidar de nosotras y el planeta.
Llega… ¡¡¡La era de la esperanza!!!
Los Shinobi fueron los primeros ninja de la tierra del sol naciente. Samurais especiales adiestrados en el arte del Ninjutsu, donde parte de su entrenamiento consistía en ser más resistentes y cultos. Manejaban diferentes armas, sabían preparar pócimas secretas e incluso podían camuflarse para no ser descubiertos en sus misiones.
Envueltos de leyendas y misterios, los Shinobi han perdurado en el tiempo, hasta que hemos reinventado sus costumbres y manera de vestir.
Hoy en día no hace falta camuflarse, pero bien es cierto que el jersey Shinobi es original y calentito.
La tierra lo tiene todo, recursos, aire, agua, arena… pero poco a poco la vamos desgastando, consumiendo sus virtudes, la mano humana deja constantemente una huella demasiado profunda, y el planeta se resiente y se queja.
La tierra son todos los elementos que hay y todos los que la habitamos, es un préstamo para vivir y se debe respetar y cuidar.
Ahora somos conscientes, o actuamos o hay fecha de caducidad, la tierra nos cuida, ¡Cuidémosla también!
Ya nada será igual…
Son años sin prestar atención, son décadas sin escuchar lo que nos rodea, son siglos sin pensar como actuar.
Pero ya no, se acabó, el tiempo y la paciencia, la tierra nos avisa constantemente, cambiad, me agoto, ya nada será igual…
Poco a poco, paso a paso, vamos aprendiendo de nuevo a darnos la mano y avanzar, respetar y cuidar, el cambio se acerca y es imparable, de nosotr@s depende…
Ya nada será igual…
Algunas tenemos el poder de ayudar a los demás, otras el poder de hacer feliz a cualquiera y algunas incluso el poder de crear vida… pero no nos olvidemos el mayor poder que tenemos es el poder de creer en nosotras mismas, capaces de todo y más, posibilidades infinitas, volar sin alas, querer y quererse, mirarse y gustarse, coserse si estamos rotas, dibujarse, mojarse, liberarse…
Ahí está el poder, ¡busca en tu interior!
Son trazos, líneas que se juntan y separan. Son vacíos llenos de vida. Son historias sin igual, son principios sin final.
Como el amor, como las personas bonitas, como los actos altruistas, como las cosas hechas con el corazón.
Infinito va más allá de un dibujo en un papel, de un símbolo hecho con pincel. Infinito es todo y nada a la vez.
Un paso adelante, levanto la mano, alzo la voz y a los cuatro vientos desafino la sintonía de mi vida, nada es perfecto, todo es bonito, en su sitio, en su lugar, ni más arriba ni más abajo, aquí, donde se aprecia toda la belleza del momento.
No pienso dejar para mañana lo que pueda hacer hoy, ¡vivo el momento!
No debemos llegar tarde, es ahora o nunca.
Hemos construido una prisión invisible de la cual no encontramos la cerradura aunque tengamos la llave.
Ahora es el momento de actuar, aprender, reaccionar y poner atención a nuestro alrededor, darnos la mano y avanzar… ¿Vienes?
Soy la resistencia, la que insiste y persiste, la que no se resigna a que esto vaya peor…
Soy del club de las almas libres, de los que suman y no restan, estoy inscrito en la lista de la isla del bien.
Soy la de los poemas hechos con el corazón, de los que cumplen las promesas por estar cada día mejor.
Soy yo, el que dia a dia abre la ventana para mojarse de luz, el que se impregna de vida, el que no se rinde con un no.
Soy la que no quiere quedarse porque si, soy la que no se conforma en vivir por estar aquí.
Si eres del clan de la libertad, bienvenido a la resistencia…
Lo quiero todo, todo lo que tengo y lo que no…
Quiero mis momentos de felicidad, los de tristeza y los que vendrán…
Quiero un mundo más unido, los de aquí y los de allá. Quiero a mis amigos y familia, quiero libertad, respeto e igualdad…
¡Dime egoísta, pero lo quiero todo!
Yo soy así, no puedo cambiar.
¡¡¡Error!!!
No se puede, se debe cambiar…
Cambiar de actitud, cambiar la manera de ver las cosas, cambiar la forma de entender las personas, cambiar como percibir la moda, cambiar el mundo.
Se puede, seguro que se puede, podemos todas, juntos o por separado, el cambio empieza en nosotr@s.
En cada uno de nuestros actos, en la manera como hacemos, vivimos y pensamos..
¿Te apuntas al cambio?
La generación futuro ya está aquí, las niñas y niños que sembrarán la tierra para recolectar el fruto de las semillas del amor, felicidad, armonía, respeto, empatía e igualdad…
Todo lo que queda por venir está en las manos de este futuro prometedor.
En la autenticidad de cada uno se encuentra la libertad de sus actos y también las consecuencias que derivan de ellos.
¡Cada uno de nosotr@s es el futuro!
Siento que todo irá bien, presiento esperanza en mi interior, espero pronto continuar mi camino, hallar senderos en calma alegres y felices que me lleven a mi destino.
Ojalá sea así.
Ojalá pueda vivir y no subsistir.
Ojalá no tenga que buscar la felicidad.
Ojalá estemos juntos.
Ojalá todo vaya bien.
Ojalá no perdamos la esperanza.
Ojalá…
Tenemos ojos, orejas, nariz, cerebro y razón, pero demasiadas veces nos falta corazón.
Dónde vamos tan deprisa, nos estamos perdiendo el paisaje, vale la pena parar, respirar, reflexionar, aceptar y cambiar.
Todos a nuestra manera, tan diferentes y tan iguales a la vez.
Con people hemos querido reivindicar la base del ser humano…
El esqueleto, calavera donde se muestra y demuestra que la única diferencia está en nuestra cabeza y no en nuestra apariencia.
Las primeras gotas del tamaño del cielo se deslizan con mimo a través de los colores del arco iris, para crear un surco al rozar la arena seca, resquemada por el sol. En ese momento, en ese preciso instante, en calma, se percibe la explosión del suave aroma que desprende la tierra.
Petricor es mucho más que una palabra, más que una prenda, más que un perfume, más que una sensación, ¡Petricor es una emoción!
Me veo tan bonita bañada de colores rojizos, verdes y azules.
Me siento llena de vida, vibrando con el cosquilleo de mil pies bailando sobre mi…
Percibo la emoción de almas libres en danza, dibujando un mapa de convivir mejor, como tesoro.
Creo que lo que creo es vida y no desastre, creo arena, hierba, agua y no el tóxico asfalto.
Creo que la humanidad son personas, ni hombres ni mujeres, ni ricos ni pobres, ni blancos ni negros, ni normales ni diferentes…
Atentamente: La Tierra.
Océanos, miles de granitos de arena reposan en la playa, descansan tostandose al sol, esperando refrescarse con la primera ola… unos vienen y van, otros se hunden en las profundidades y los demás esperan pacientemente la llegada de la luna para darse un baño de color.
Arena y tierra besadas por la lluvia y el mar… Seca y mojada, rojiza y naranja, dura y movediza, arena que sustenta nuestros pies… ¡Cuidémosla!